La idea que tenían los clientes era hacer una casa en una parcela con desnivel descendente desde la zona de entrada. Destinada a segunda vivienda, su uso se preveía para los meses de primavera y verano, fines de semana o estancias inferiores a 15 días.
Debido a las altas temperaturas que se alcanzan allí en verano, su deseo era hacer una piscina y que toda la casa girara en torno a ella.
Otra petición expresa fue que en la casa pudiesen disponerse varias camas o colchones de forma esporádica para recibir a invitados y amigos.